Glorieta de Santa Justa

Nombre: Glorieta de Santa Justa

Tipo: Glorietas y rotondas

Distrito: San Pablo - Santa Justa

CP: 41007

Situación: confluencia de la Avda. de Kansas City y las calles Concejal Francisco Ballesteros, Pablo Picasso y José Laguillo

Acceso: líneas 32, C1, C2 y EA

Superficie: 700 m²

Descripción:

Situada en la confluencia de la Avenida Kansas City –que continúa más allá con el mismo nombre- y las calles mencionadas, es un importante nudo de comunicaciones en el área este de la ciudad.

Junto a la nueva estación de Santa Justa y remodelada cuando se construyó ésta, se ha convertido en uno de los principales itinerarios para aquéllos que, desde el interior de la ciudad, se dirigen hacia el aeropuerto. Se trata de una rotonda o glorieta para ordenación del trafico, fórmula que se ha vuelto habitual para canalizar la circulación facilitando los diversos giros con el menor número de semáforos posible.

Hay distribuidas varias de estas glorietas a lo largo de las nuevas vías trazadas en la ciudad con motivo de la puesta en práctica del Plan General de Ordenación Urbana de 1987 y terminadas en fechas cercanas a al Exposición Universal de 1992, que es también cuando se inaugura la nueva estación ferroviaria. Destacan, junto a ésta, las existentes en la llamada Ronda del Tamarguillo, construida sobre el antiguo cauce del arroyo Tamarguillo que ahora discurre entubado debajo, y las trazadas en la denominada Ronda Norte.  Las principales son tratadas en diversos apartados de manera individualizada.

Constituyen nudos de comunicación que sirven asimismo para fragmentar las prolongadas avenidas en las que se sitúan, (como otras existentes en esta misma avenida) separando entre sí tramos de las mismas que suelen presentar cada uno distintas soluciones de jardinería  urbana, casi siempre basadas en  paseos arbolados.

La ciudad, antes de las fechas señaladas poseía pocas y sobre todo nunca se había cuidado tanto la jardinería en ellas, estando las que había o bien baldías o exclusivamente pavimentadas. Sólo algunas como la Plaza de Don Juan de Austria –La Pasarela-, la Plaza del Capitán Cortes (hoy llamada Gran plaza) o la Plaza de Cuba que desde siempre han merecido el calificativo de plazas y tenían cuidadas composiciones vegetales.

Con posterioridad se ha puesto especial cuidado en dotarlas de una vegetación tupida, con acertadas gradaciones hacia el centro de las mismas, combinando tapizantes, rastreras, arbustivas y árboles de variadas características que las han convertido en enclaves paisajísticos de notable calidad. En la mayor parte de los casos, aunque suelen poseer una pequeña acera que las encinta, no son especialmente aptas para el acceso directo de los peatones, pues en su mayoría no disponen de pasos para los mismos que permitan salvar el incesante trafico que a toda hora las rodea, ni tampoco áreas de paseo o asiento en su interior.  En ocasiones no cuentan, en las aceras situadas más allá de la calzada destinada al tráfico que las rodea, con una vegetación arbórea que sirva de respuesta al área central como en las plazas tradicionales. Por ello, se convierten en hitos vegetales de marcado carácter paisajístico que rompen la prolongada linealidad de las avenidas con una vegetación que conduce visualmente al conductor- antes quizás que al peatón- desde su contorno hacia el centro.

A este planteamiento responde esta glorieta circular, visible fácilmente por el gran árbol que la preside, tanto desde la propia avenida Kansas City , como desde la calle José Laguillo, que desde los alrededores de Santa Justa inicia una suave bajada que tiene como final la glorieta misma. Se encuentra separada de la calzada por un bordillo que eleva el plano de la misma sobre ésta, y rodeada de una pequeña acera que la ciñe en su totalidad, tras la que se sitúa una protección metálica formada por semicircunferencias que se entrecruzan, que tiene poca altura (unos 40 cm.), y que es frecuente ver en otras glorietas, islotes o refugios ante el tráfico de la ciudad.

Su interior se halla presidido en el centro por un aislado laurel de indias (Ficus microcarpa) centro de toda la composición que cobija bajo su cada vez mayor copa una densa agrupación arbustiva. Concéntrica se extiende una alfombra de césped que conduce hacia una franja anular densamente poblada por lantana (Lantana camara). Este anillo presenta en su contorno, levemente introducidos en él, varios ejemplares de laureles (laurus nobilis) recortados para que presenten forma cónica. Por último, una nueva franja anular de césped, esta vez más estrecha, lleva hacia la protección metálica antes descrita. La sencilla composición, adecuadamente graduada para conducir desde el exterior hasta el punto focal del centro constituido por el ficus, constituye un agradable hito vegetal que marca el quiebro de la avenida Kansas City en una confluencia de calles sometida a un intenso tráfico.

Esta rotonda o glorieta es ejemplo, como otros enclaves ajardinados de la ciudad, del uso de ejemplares arbóreos aislados a los que se confía toda una composición vegetal y en las que muy asiduamente en los últimos años se ha utilizado el Ficus microcarpa. Desde el ejemplar (ya existente allí desde antiguo) de la señera plaza de San Leandro, hasta las modernas realizaciones de la plaza en la calle Alfarería,  la  cercana de Clara de Jesús Montero, o la similar glorieta situada en la confluencia de la Ronda del Tamarguillo con la Avenida Ramón y Cajal y la calle Hytasa, la ciudad ha venido confiando reiteradamente en esta sencilla pero eficaz fórmula que tiene también en otros ejemplares de procedencia subtropical como el ombú (Phytolacca dioica) destacados representantes.

Asimismo constituye también ejemplo del uso del laurel (laurus nobilis) recortado en forma cónica. Ejemplo de topiaria  que era ajena a la jardinería urbana sevillana y que en determinados momentos se propagó por diferentes lugares de la misma (Glorieta Cayetana de Alba, Paseo Padre J. Mª Javierre Ortas, Glorieta de los Marineros, etc).